Soy amante del deporte y de los eventos "bien realizados" (no como en "chilito") por ello disfruté, de punta a cabo, el torneo de tenis de Wimbledon, con todos sus rituales de "deporte Blanco". Más allá del excelente nivel de los encuentros jugados (todos!!!), me gustaría destacar el siguiente hecho: Mientras se jugaba una de las semifinales entre Djokovic y Federer (qué partidazo!!!) , a eso de las 10:20hrs, los comentaristas (tenistas especializados en el tema, no los personajes apitutados que nos "venden la pescada" por aquí) hablaban de la preocupación de los organizadores por la posibilidad que el partido se extendiera más allá de las 23:00hr PM, con el riesgo de tener que postergarlo para el otro día. Wimbledon está emplazado en un barrio residencial y la ordenanza municipal prohíbe la emisión de ruidos molestos pasada esa hora, aunque el estadio está construído de manera de disminuir los ruidos provenientes de las canchas. De seguro, si se le hace una encuesta a los residentes, muy pocos podrían oponerse a la excepción a ésta regla para permitir que un espectáculo deportivo de ésta jerarquía se realizara, pero lo fabuloso de ésto es el respeto absoluto y tajante que las autoridades hacen de las normativas impuestas. Qué muestra de civilidad. No me imagino una situación así en Chile, en que las normas son hechas para ser desobedecidas por quiénes "se sientan" en los derechos de los demás ciudadanos. Pienso en las constructoras que trabajan en horarios que la población descansa, en las ferias que se toman las calles e impiden que los residentes hagan una vida normal, en los Okupas que se apropian de casas abandonadas y "echan a perder" los barrios, en las empresas contaminantes que (coimas mediante) perjudican grandes áreas urbanas con la anuencia de las autoridades, recitales y eventos deportivos (mal organizados) que afectan, no sólo el sueño, sino la tranquilidad de los vecinos...y un largo etcétera!!! Pensé también en nuestros jueces garantistas que, desatendiendo sus deberes, favorecen siempre a los victimarios sobre sus víctimas, el mismo"caso bombas" por ejemplo, en que la jueza Marcela Sandoval "se dió el gustito" de "pisotear" al ministro Hinzpeter y darle una mano a sus "amiguis" comunistas. Wimbledon me hizo pensar en lo lejos que nos encontramos de ser realmente un país desarrollado...y de paso, en el papelón que haremos organizando los JUEGOS ODESUR 2014, con un subsecretario de deportes que sabe mucho de lucrar con un club de fútbol, ero muy poco de "DEPORTE".